Bienvenidos a esta deliciosa receta de salsa alfredo, un clásico de la cocina italiana que seguramente te va a encantar. Esta salsa es perfecta para acompañar cualquier tipo de pasta y su sabor cremoso te va a dejar sin palabras.
Preparar esta receta te llevará tan solo 10 minutos y el tiempo de cocción es de 15 minutos. En total, en menos de media hora, estarás disfrutando de esta deliciosa salsa. Y la mejor parte es que es muy fácil de hacer, así que no te preocupes si no eres un experto en la cocina. La dificultad de esta receta es baja, así que ¡anímate a cocinar!
Ingredientes para 4 personas:
- 250g de pasta (la de tu preferencia)
- 50g de mantequilla
- 200ml de crema de leche
- 100g de queso parmesano rallado
- Sal y pimienta al gusto
- Nuez moscada al gusto (opcional)
Preparación:
Desde ya te digo que esta receta es tan fácil que vas a querer hacerla siempre. No te me agobies, que vas a ver que en un dos por tres la tienes lista.
1. Lo primero que debes hacer es cocinar la pasta en una olla con agua hirviendo y sal, según las indicaciones del paquete. No te preocupes, ¡no es ciencia espacial!
2. Mientras tanto, en una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio-bajo. Verás cómo poco a poco se va derritiendo y llenando tu cocina de un olor delicioso.
3. Luego, agrega la crema de leche a la sartén y revuelve bien con la mantequilla. Vas a notar cómo la mezcla se va poniendo de un color blanco cremoso que te va a tentar a meter la cuchara en ese mismo momento, ¡pero aguanta un poco más!
4. Ahora es momento de añadir el queso parmesano rallado a la mezcla. Revuelve bien para que se derrita y se integre completamente. Vas a ver cómo la salsa va tomando consistencia y el olor te va a hacer agua la boca.
5. Cuando la pasta esté lista, escúrrela y agrégala directamente a la sartén con la salsa. Mezcla todo muy bien para que la pasta quede impregnada de esa maravillosa salsa alfredo que acabas de preparar. No te preocupes si babeas un poco, es normal.
6. Finalmente, sazona con sal, pimienta y nuez moscada al gusto. Prueba la salsa y si sientes que le falta un toque de queso, ¡no te cortes! Agrégale un poquito más, que para eso estamos cocinando en casa y nadie nos va a juzgar.
¡Y voilà! Ya tienes lista tu salsa alfredo para disfrutar. Sirve la pasta con esta deliciosa salsa y acompáñala con un buen vino o una limonada bien fría.
Espero que hayas disfrutado mucho preparando esta receta y sobre todo que la disfrutes al probarla. Recuerda, no te agobies en la cocina, todo es cuestión de práctica y paciencia. ¡Buen provecho!
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