La pinsa romana es un plato típico de la gastronomía italiana que se ha vuelto muy popular en los últimos años. Se caracteriza por su masa ligera y crujiente, y su forma ovalada. Si te encanta la pizza, esta receta te va a enamorar.
Preparar y cocinar: 30 minutos
Tiempo total: 2 horas
Dificultad: Fácil
Ingredientes para 4 personas:
- 500 gramos de harina de trigo
- 350 ml de agua
- 15 gramos de sal
- 1 gramo de levadura fresca
- 300 gramos de masa madre
Preparación:
¡Hola, amantes de la cocina casera! Hoy vamos a preparar una auténtica pinsa romana. Lo primero que tenemos que hacer es mezclar la harina con el agua, la sal y la levadura fresca. Amásalo con pasión hasta que obtengas una masa suave y elástica. No te preocupes si al principio parece pegajosa, con un poco de paciencia y cariño la masa tomará la consistencia ideal. Déjala reposar durante 30 minutos en un lugar cálido mientras te relajas un poco.
Ahora es el momento de meter las manos en la masa (literalmente). Extiende la masa sobre una bandeja de horno con las manos para que quede una base finita, pero no te preocupes por que quede perfecta, la gracia está en su forma rústica. Agrega la masa madre y distribúyela de manera uniforme. Precalienta el horno a 250°C y hornea la pinsa durante 10-15 minutos, hasta que esté doradita y deliciosa. ¡Que tentación!
¡Listo! Ahora puedes disfrutar de una increíble pinsa romana en la comodidad de tu hogar. ¿A que no fue tan difícil como pensabas? ¡Ahora a disfrutar!
Espero que te hayas sentido valiente y capaz durante esta receta. ¡Felicidades por atreverte a crear tu propia pinsa romana! Cuéntame en los comentarios cómo te ha salido y si la disfrutaste tanto como yo. ¡Nos vemos en la próxima receta, cocinero intrépido!
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