Las croquetas son un clásico que nunca pasa de moda, pero hoy te traigo una receta con un toque especial: croquetas de espinacas y queso. Su sabor es tan increíble que te aseguro que te chuparás los dedos al probarlas. Y lo mejor de todo es que son muy fáciles de preparar. ¿Estás listo para sorprender a todos con esta delicia?
Preparación: 20 minutos | Cocción: 15 minutos | Total: 35 minutos | Dificultad: Fácil
Ingredientes para 4 personas:
- 200g de espinacas frescas
- 100g de queso parmesano rallado
- 50g de queso mozzarella rallado
- 1 huevo
- 50g de harina de trigo
- 50g de mantequilla
- 1 taza de leche
- Pan rallado
- Aceite para freír
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
¡Hola, cocinillas! Antes de comenzar con esta receta, asegúrate de tener buena música de fondo y, sobre todo, de estar de buen humor. La cocina es como una coreografía, ¡diviértete con ella!
Paso 1: Primero, lavamos las espinacas y las cocemos en agua hirviendo durante unos 3 minutos. Luego, las escurrimos muy bien y las picamos finamente. ¡Que no se escape ninguna espinaca de la fiesta en tu sartén!
Paso 2: En una sartén, derretimos la mantequilla a fuego medio. Añadimos la harina y removemos constantemente para formar una mezcla homogénea. Después, vertemos la leche poco a poco sin dejar de mover, como si estuviéramos bailando un tango. Agregamos las espinacas, el queso parmesano y el queso mozzarella. Salpimentamos al gusto y cocinamos todo por 5 minutos. Esta mezcla tiene que quedar bien cremosa, como un abrazo calentito.
Paso 3: Una vez lista la mezcla, la extendemos en un recipiente y la dejamos enfriar. Luego, formamos bolitas o croquetas alargadas, ¡como si estuviéramos moldeando esculturas culinarias!
Paso 4: Pasamos las croquetas por huevo batido y luego por el pan rallado, asegurándonos de que queden bien empanizadas, ¡como si las estuviéramos arropando antes de freírlas!
Paso 5: En una sartén con suficiente aceite caliente, freímos las croquetas hasta que estén doradas por fuera, ¡cuidando que no se quemen! Las retiramos y las dejamos escurrir en papel absorbente. ¡Que no se te caiga la baba al verlas tan doraditas y deliciosas!
Y voilà, las croquetas de espinacas y queso están listas para ser disfrutadas. ¡A prepararse para recibir los aplausos, maestro cocinero!
Y aquí estás, al final de la receta, con tus croquetas listas para ser devoradas. ¿Quién lo diría? La cocina no tiene por qué ser complicada, ¿verdad? Ahora que has cumplido tu misión culinaria del día, cuéntame cómo te ha ido. ¿Has disfrutado preparando esta receta tanto como espero que disfrutes degustándola? Cuéntame en los comentarios, ¡quiero saber tus logros en la cocina!
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